Cuando era libre, emprendí un viaje, sin destino, con el equipaje casi vacío, dispuesta a llenarlo de millones de cosas que encontraría. Cuando había empezado con mi cometido, encontré unas cuerdas en mitad del camino y no supe sino enredarme en ellas; no sólo no fui capaz de bordearlas: tampoco he sido capaz largo tiempo de salir de ellas.
He estado ahí, atrapada por ellas, y con la firme idea de liberarme, pero sin hacer en realidad otra cosa que dejarme caer en ellas, viendo como el tiempo iba pasando y yo lo perdía allí. No me sentía capaz de continuar, de dejarlas de lado y proseguir mi camino.
Por fin soy consciente que no hacía más que perder el tiempo, un tiempo que vale oro (¡la de millones que debo haber perdido!) y que he desperdiciado atrapada en una maraña en la que me inmiscuí yo sola y a la que me aferré.
Ahora soy consciente de todo, he visto que sigo siendo tan libre como lo era, y que nada me impide seguir adelante...
Así que aquí me tenéis, en mitad del sendero, con las maletas en las manos, dispuesta a seguir llenándolas. Sé que tardaré un poco en retomar la energía y la fortaleza que había conseguido a base de andar día a día. Me queda un largo camino por delante, y me encontraré con tantos o más obstáculos como los que han quedado atrás, pero me enfrentaré a ellos con la experiencia que he ido acumulando.
Ya he dado el primer paso, el fundamental:
Volver a andar, volver a viajar.
Vuelvo a ser libre.
~~~~~
Por fin he terminado los exámenes; en realidad los terminé la tarde del viernes pasado, pero he necesitado unos días para desconectar de todo un poco, relajarme y poder enfrentarme a las mil cosas que quiero hacer.
De momento he dejado esto aquí. Lo escribí cuando volvía a casa después de las clases a las que he estado yendo este verano (que me ha servido para suspender igualmente)... Pero no lo llegué a subir, y tampoco lo quería dejar perdido entre las hojas de alguna libreta.
Ahora vuelvo a la carga, y creo que con las pilas bastante cargadas.
He estado ahí, atrapada por ellas, y con la firme idea de liberarme, pero sin hacer en realidad otra cosa que dejarme caer en ellas, viendo como el tiempo iba pasando y yo lo perdía allí. No me sentía capaz de continuar, de dejarlas de lado y proseguir mi camino.
Por fin soy consciente que no hacía más que perder el tiempo, un tiempo que vale oro (¡la de millones que debo haber perdido!) y que he desperdiciado atrapada en una maraña en la que me inmiscuí yo sola y a la que me aferré.
Ahora soy consciente de todo, he visto que sigo siendo tan libre como lo era, y que nada me impide seguir adelante...
Así que aquí me tenéis, en mitad del sendero, con las maletas en las manos, dispuesta a seguir llenándolas. Sé que tardaré un poco en retomar la energía y la fortaleza que había conseguido a base de andar día a día. Me queda un largo camino por delante, y me encontraré con tantos o más obstáculos como los que han quedado atrás, pero me enfrentaré a ellos con la experiencia que he ido acumulando.
Ya he dado el primer paso, el fundamental:
Volver a andar, volver a viajar.
Vuelvo a ser libre.
~~~~~
Por fin he terminado los exámenes; en realidad los terminé la tarde del viernes pasado, pero he necesitado unos días para desconectar de todo un poco, relajarme y poder enfrentarme a las mil cosas que quiero hacer.
De momento he dejado esto aquí. Lo escribí cuando volvía a casa después de las clases a las que he estado yendo este verano (que me ha servido para suspender igualmente)... Pero no lo llegué a subir, y tampoco lo quería dejar perdido entre las hojas de alguna libreta.
Ahora vuelvo a la carga, y creo que con las pilas bastante cargadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario