Aquí es donde Laia Álvarez deja sus pensamientos, pequeñas reflexiones, canciones que le tocan la fibra sensible... Cosas, en definitiva, que le rondan la cabeza y el corazón. No obstante, este pretende ser un espacio compartido, donde el lector pueda tener también un pequeño espacio donde dejar cuanto quiera dejar.


Empezamos en 3... 2... 1... ¡Ya!

6.4.06

~ La ciudad


¡Necesito salir!!Hay momentos en que necesitamos evadirnos... Todos necesitamos evadirnos alguna vez. Pero no siempre podemos.

Ahora necesitaría abandonar la ciudad. Pasar un tiempo en la montaña, tranquila, pudiendo pensar...
Y cambiar el ruido de los coches por el de los pájaros cantando y los árboles movidos por el viento.
Y cambiar los coches y autobuses por mis propias piernas.
Y cambiar el sofá y la tele por un prado verde sobre el que tumbarme para mirar las nubes.
Y cambiar las horas perdidas jugando con el ordenador por horas aprovechadas de reflexión.
Y cambiar humos que dejan los coches al pasar por aire de verdad.
Y cambiar lo que me dicen que tengo que hacer por lo que yo quiero hacer.
Y cambiar... Simplemente cambiar.
Cambiarme, si nos ponemos a matizar.
Replantearme todo; si hace falta, volver a empezar.

Pensar sobre mí, saber qué hacer con mi vida.

Pensar no en qué quiero ser, sino en quién quiero ser.

Simplemente... ¡PENSAR!!


Pero no. La cuidad se echa sobre ti. Te hace sentirte como una pequeña hormiga que no puede salir de la fila, y tiene que hacer lo mismo día tras día, siguiendo la constante rutina. La aburrida rutina.

Y entonces, levantas la vista y ves ese cielo, esperándote pero te sientes sumergido por la ciudad, que te encierra... Y no te deja escapar...

Pero mientras tanto, podríamos empezar a actuar, no quedarnos de brazos cruzado y seguir luchando. No esperar que nos digan que podemos salir, sino salir cuando queramos sin que nadie nos lo pueda impedir.