Aquí es donde Laia Álvarez deja sus pensamientos, pequeñas reflexiones, canciones que le tocan la fibra sensible... Cosas, en definitiva, que le rondan la cabeza y el corazón. No obstante, este pretende ser un espacio compartido, donde el lector pueda tener también un pequeño espacio donde dejar cuanto quiera dejar.


Empezamos en 3... 2... 1... ¡Ya!

25.11.09

~ Sin título

Hace tiempo (más de un año, de hecho) empecé lo que pretendía ser una novela. No es la primera, y sé que algún día, quizás hoy mismo, quizás mañana, o quizás dentro de varios meses, las retomaré.

De momento, tan sólo puedo decir que una novela sin título aún (ni tan siquiera sé qué va a pasar) comienza así:
Miró por la ventanilla que quedaba a su izquierda; el paisaje que podía verse a través de ella, se movía a gran velocidad. Ya no se veía ni rastro del mar, ni se iba a ver a no ser que tomase el camino de vuelta. En el interior del país había ríos, lagos, montaña, nieve en invierno, incluso ya más entrada la primavera; había cientos de cosas, pero no había mar.

En realidad, no estaba tan convencida de que fuese a echarlo tanto en falta como en un primer momento pensó; quizás pasaría unos días, tal vez un par de semanas dándole vueltas, pero luego encontraría 'ese' encanto de la ciudad a la que se dirigía sustituyendo al mar. Al fin y al cabo, la playa, tal como se suele entender, no era precisamente lo que más le gustaba; en verano no iba nunca a tostarse al sol, como tantos otros sí hacían, no le gustaba. Lo que le gustaba era ir a pasear tranquilamente, en invierno, o en las noches de verano, con la brisa jugando con su pelo, enredándolo como sólo ella era capaz de hacer, mientras la espuma de las olas que rompían en su llegada a la costa acariciaba su piel. También le gustaba perderse en alguna cala solitaria, oscura, sin ninguna luz que se inmiscuyese en la escena, salvo quizás la de algún faro tratando de indicar su presencia.


Sí, hasta que no encontrase una alternativa para sus momentos en su nueva ciudad, echaría de menos esa forma de entender el mar que tenía.

1 comentario:

Unknown dijo...

Buen comienzo. Me gusta.